CASUALIDAD: Munich, Arquitectura, Paseo, Lectura.

Casualidad: Combinación de circunstancias que no se pueden prever ni evitar.
Casualidad, en mi caso: vas a Munich de vacaciones, paseando te topas con una librería especializada en arquitectura, entras y tienen una exposición monográfica sobre el último libro de arquitectura que te han regalado: "Yes Is More". Yes is more o arquitectura positiva; eso dicen, porque ese concepto a pesar de todo no sé todavía si creérmelo.


Aunque no recomendaría el libro porque su formato está lejos de ser el más adecuado, sí que lo recomiendo por su contenido: un monográfico del estudio de arquitectura danés BIG . Realmente interesantes proyectos, curiosamente desarrollados y con un resultado más que admirable.


Aunque no recomendaría la exposición por como está montada, sí que la recomiendo porque las maquetas en ella expuestas son de esas que realmente definen un proyecto.


Lo que sí que recomedaría y recomiendo como visita obligada es esta Librería : estanterías infinitas donde perderte, libros de arquitectura y diseño, antiguos y modernos, de teoría y de ejemplos, y sala de exposiciones.



Casualidad o no, yo, acabo de estar. Ahora, te toca a ti.

PRAGA, KARLIN... ¡BAGETERIA BOULEVARD!

Esta semana pasada en mi viaje a Praga aproveché para visitar un proyecto que realicé en colaboración con el despacho checo Archicraft s.r.o. justo ahora hace un año. Se trata de uno de los restaurantes de la cadena de comida rápida checa Bageteria Boulevard, situado en el barrio de Karlin, Praga.


El proyecto trata de abordar los restaurantes de comida rápida desde otra perspectiva, sin olvidar lo importante que son en ellos el propio concepto de "marca" de la cadena, pero intentando esta vez adaptarnos a la idiosincrasia propia del barrio, un pasado totalmente industrial, y un presente todavía hipotecado por ello.




Un espacio continuo, con un suelo discuntinuo donde la materialidad de éste adquiere todo el proganismo, configura diferentes espacios y hace preguntarse a uno por los posibles que podrían haber sido albergados en esas dependencias imaginarias en un pasado industrial.


Por tanto diferentes juegos de baldosas cerámicas de corte decimonónico o de principios del siglo veinte, se combinan con madera delimitando y generando los diferentes ambientes sin perder nunca la percepción general de unidad espacial.


Luminarias de corte industrial personalizan cada ambiente amoldando la intensidad lúminica de éste en función de su uso: zona de pedido, de mesas altas, de mesas de consumo normal....


En las paredes se integra la imagen corporativa del local a modo de recortes sobre la pared, como si realmente fueran vestigios del pasado del barrio.


Mobiliario diferente, pero a su vez repetido, ahonda más aún en la idea de que el espacio se trata de una suma, de una mezcla.


Como último guiño y generar más teatralidad, la climatización queda integrada en una luminaria que simula una vidriera de una fábrica, pasando su uso totalmente desapercibido para el usuario.


El mobiliario de recogida de bandejas, como de almacenamiento, así como todas las mesas, se diseñan para la ocasión. Madera, linóleo, metal, y una gama de color muy concreta y caracterizada, son el punto y final al diseño de este espacio.


¿Te apetece un bocadillo?
Te acompaño...